La sanidad es un derecho. Tenemos en Cataluña un sistema hospitalario envidiable, pero a los usuarios del mismo nos restringen la libre elección a su acceso.
Nos limitan a un territorio cuando la atención que necesitamos no nos la pueden ofrecer.
Observamos impasibles la necesidad de abrirnos y compartir en muchas materias y justamente en la más importante, que es la salud, nos confinan sin tener opción si no es pagando una sanidad privada, a no tener ese derecho fundamental como es la libertad de poder elegir dónde ser atendidos.